Imaginemos ahora que una nebulosa cinematográfica invade este blog y nos indica, que su protagonista, es decir, yo, va a remontarse a tiempos pasados..........................................
Desde muy pequeños mi madre quiso que sus hijos fueran unas hormiguitas ahorradoras; conscientes del valor del dinero y de lo mucho que costaba ganarlo. Por eso, nuestra paga, en vez de ser semanal, era mensual. Así fue cómo a muy corta edad, entendí lo que significaba llegar a fin de mes, o mejor dicho, no llegar. Como en la vida real, a medida que pasaban los años, la paga iba aumentando, pero mi mdare, además de muy moderna, parecía ser de la patronal y siempre nos subía lo justito.
En cuanto tuve cerebro como para sumar, restar, dividir y multiplicar pasé a recibir mi asignación mensual. Con mis 2000 pesetas en el bolsillo podía sentirme el amo del mundo y salir a la calle dispuesto a satisfacer mis vicios: discos, revistas y chicles de fresa ácida.Durante esos primeros días de cada mes, acudía a la pequeña tienda de discos de mi calle en busca de novedades. Nadie en el barrio ignoraba que el marido de la dueña (que regentaba una peluquería), había sido acusado de meter mano a varios de sus empleados/as. Como en aquellos años no se denunciaba a nadie por ese motivo, la gente se limitaba a decir que era un marrano y ella (su santa esposa), una "véte tú a saber". Mi relación comercial con aquella simpática señora se prolongó durante muchos años, hasta la llegada del cd y el cese del negocio.
Visitar el escaparate de aquella tienda a día 20 y comprobar que mis arcas estaban vacías era todo un suplicio, así que pronto aprendí a obtener algunos ingresos extras.
Nunca he poseído dotes artísticas y las manualidades siempre se me han dado fatal, pero con cuatro garabatos y mi caja de Alpino entendí que mis "obras de arte" podían tener un precio. Acostumbraba a ser el protagonista de casi todos los cuadros, en los que aparecía cogido de la mano del familiar al que fuera destinada la venta. Solía representar una escena típica y tópica, pero en el fondo dirigida a enternecer el corazón de cualquier adulto. Puede que no fuera consciente de ello, pero de esta forma, tocando "la fibra sensible" de mis tíos y abuelos, estaba aumentando mis beneficios.
La edad en la que cualquier cosa que uno hace resulta graciosa pasó y en la adolescencia mis garabatos no habían evolucionado nada. Sin paciencia ni talento para el dibujo, comencé a cultivar otras malas artes. Aprovechando algunas ausencias de mis padres, mis hermanos, mayores que yo, solían traer a sus "amiguitos" y "amiguitas" a casa . Unas cuantas monedas bastaban para que durante aquellas visitas, yo no me conviertiera en una mosca cojonera.
Pocos tiempo después, perfeccioné mis sobornos prestando mis particulares servicios a mi propia madre. A cambio de quedarme en casa durante todo un fin de semana y controlar a mi hermana y su novio (que pasaba unos días con nosotros) recibí 5000 pesetas. Lo que ella nunca supo, es que cobré de mi futuro cuñado la misma cantidad por "desaparecer del mapa" y dejarlos tranquilos.
Alquilar prendas de ropa a mi hermana o no mencionar los condones que mi hermano mayor guardaba en una mochila, fueron otros métodos que utilicé para poder llegar a fin de mes sin problemas.
Volvamos a una nueva nebulosa que da paso a imágenes más nítidas, indicando que el protagonista de este blog (yo, otra vez), regresa al presente.
Además del valor sentimental de mi colección de discos, algunos, con el paso de los años se han convertido en auténticas rarezas por las que podría sacar algún beneficio. Pero no puedo evitar reirme al pensar en la cara que pondrían las novias de mis hermano, cuando éste les decía: "tranquila, le he dado cien pesetas a mi hermano para que vea la televisión un buen rato"
15 comentarios:
me ha encantado. menudo as de las finanzas estabas hecho ya en tus años mozos. y además era agente doble, tu sí que sabías de contraespionaje. nada, nada, que unas habilidades como las tuyas bien se merecían una compensación económica.
Acabo de comprobar la guía de colores que publique hace tiempo, y he visto que al chiquito este le debía de gustar lo de la lluvia dorada, pero parece que luego a mitad de la actuación cambió de idea.
A mi se me ha dadao siempre muy mal lo de chantajear, pero bien lo de sisar.
¿Espera... el pañuelo es amarillo (lluvia dorada) o mostaza (bien dotado)?
Quizá se lo deberíamos preguntar a Ripley, quizá se acostó con este chiquito, y es uno de los famosos de los que hablará cuando publique sus memorias o tire de la manta.
O sea que eras lo que entre los hermanos mayores se llama una rata enana chantajista. JAJAJAJAJAJA quién lo iba a decir.
Ay mis discos single de vinilo, unos cientos, perdidos en el albur de los traslados de casas...y los LP's no hace tanto desterrados-regalados por mi pareja porque ocupaban mucho sitio...
Oye, alguno de esos dibujos tiernos conservarás, ¿no?.
Menudo pillastre. Los hermanos pequeños aprenden rápido y más les vale.
Mi enano que es hijounico.com, sin embargo también utiliza el truco de tocar la fibra sensible con sus garabatos-los cobra a 2€ ¿quien co*o se lo ha enseñado?
Me ha encantado el recurso cinematográfico. Vamos que te he visto retrocediendo a la niñez envuelto en brumas, jajaja.
Yo estaba lokatis x PedroMarín. Me encantaba su bizquera. AIREEEEE...
Qué mamonazo, chantajista y chivato de mierda, qué ascazo de criatura, lo raro es que tus hermanos no te arrancaran la cabeza de un buen pescozón por insufrible.
Yo... sisaba.
Bueno, también había día que no compraba nada en el recreo y así... llegaron mis primeros LPs.
¡¡Qué tiempos!!!
Unas partidas de futbolin, jugando mil a la vez; y, para poco más daba. Y, a pedir a las abuelas, no se me ocurría otra manera, menuda mi madre. Saludos
Lo que sea por un buen single de vinilo, ¡faltaría más!
Jjejeje, yo también vendía mis dibujitos y sisaba de la compra que daba gusto, menuda choriza estaba hecha!!!!
Joé, pues una vez leído este post, puedo exclamar... ¡qué suerte tuve con mi hermano! Me llega a tocar alguien como tú y vamos...
jejejej...¡qué Rockefeller tacita a tacita! Me parece muy bien...el dinero siempre es poco:-)
¡Cómo ha enloquecido Yunza con el pañuelo! ¡Cómo se fija el tío, qué ojo! Si Pedro se lo ponía, era un gesto que indicaba que esa noche nos acostábamos en el Gran Hotel Sarrià...Y luego le detenían por acostarse conmigo, porque yo era menor, y Pedro no...:-)
Con Pedro Marín no coincidí nunca, pero con Iván una vez en el Puente Aéreo sí:-), y también era mucho más mayor, iba ya él con trajecito y corbata...Iba sentado dos asientos delante, y le miré "la matrícula" de detrás varias veces:-) Pero eso va pá las memorias, y "Planeta" me tiene prohibido hablar:-)Yo al contrario que Yunzapito, siempre cojo los aviones duchado y con prisas, se me olvida hacer tiempo en las salas Vips y aprovechar las instalaciones:-) ¡Qué malas son las prisas para el amor!:-)
Besotes.
Que espabilao eras desde pequeñito. Y rápido, porque si has sobrevivido todo este tiempo a tu familia, es que corrías más rápido que ellos. El hijo del viento, por no decirte hijodeputa que tu santamare no tiene la culpa de ná jajaaa.
Jajajaja...¡Vaya vista comercial que tenías ya desde pequeñito,eh! Todo un lince de los negocios,vamos!
Besitos!
jajajaja! Por Favor que risa! y ahora que metodos de chantajes haces? eso si que no lo cuentas eh? dicen que las malas mañas que tenemos desde niños nunca se quitan
Podrias vender tus discos en EBAY y sacar algunas pesetas.
Esos eran los programas de TV que veias? Porque será que en los años 70's y 80's la gente bailaba como si tuviera un ataque. Ha sido fantastico el momento "camara lenta" y el final cuando se arranca la camisa para darsela a una fan
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