lunes, 3 de septiembre de 2007

LISBOA I

Comencé mi viaje a Lisboa merendándome un par de Orfidales y una Dormidina, suficientes como para perder el respeto que tengo a los aviones y para que durante el aterrizaje, que fue bastante aparatoso, yo permaneciera con mi sonrisa bobalicona.
Llegamos a la capital bien entrada la noche y nada más dejar las maletas en el hotel fuimos en busca de un restaurante donde pudiéramos comer algo.
Por la mañana, al despertar, no recordaba que nos hubieran dado una habitación tan grande y en plena resaca química llegué a pensar que mientras dormíamos, nos habían trasladado a otra mejor, de ser cierto, habría sido todo un detalle pero enseguida recordé que no es aconsejable mezclar dos copas de vino con fármacos (a lo sumo, una).
Los crosissants del desayuno eran mucho más amarillos de lo que deberían y el zumo de naranja me recordaba al sabor de un sobre de Frenadol, así que optamos por no seguir aceptando más detalles del hotel.
De mi primera noche, recordaba haber visto pequeñas piedras amontonadas en las esquinas de las calles y pensar que la gente las dejaba allí para que tuvieras un arma arrojadiza a mano en caso de atraco. Lo cierto es que son adoquines despegados del asfalto, que los lisboetas (muy apañaos ellos) retiran a una esquina para que puedas tropezar mejor con los socavones que dejan.Lisboa no es una ciudad de grandes museos ni ruinas históricas pero sí ideal para dar largos paseos y subir calles empinadas como la Cuesta del Calvario de mi pueblo. Incluso cuando crees que estás bajando, llega un momento en el que vuelves a subir.
A primera vista me llamó la atención la dejadez (o escasez de fondos) que lucen sus edificios. Muchos de ellos, situados en pleno centro, abandonados y en ruinas, podrían convertirse en el paraíso de cualquier okupa, así que no entiendo qué hacen en ciudades como Madrid o Barcelona, supongo que el negocio de tocar (mal) la flauta con un perro pulgoso no debe ser tan rentable.
La primera noche y para celebrar nuestro tercer aniversario (ya llevo tres años "casao") fuimos a un club de fados, después de merodear por varios, optamos por uno muy popular (tanto en precios como en personal). A mi esposo, la pinta de estos tres sujetos no le gustaba en absoluto pero yo, que tengo más don de gentes, enseguida entablé conversación con la cantante. Varios espontáneos salieron a cantar junto a los camareros y hasta yo pensé en hacer una versión de "Descongélate" pero mi esposo (muy sabio él) me recomendó que lo dejara para más tarde. La cena y el show fueron todo un éxito y continuamos la celebración con varios mojitos en el Barrio Alto de la ciudad.
La visita al Castillo de San Jorge parecía obligada y no entiendo cómo pudieron construir algo tan grande para un santo tan pequeño. Si no fuera por las vistas, la visita podría ser eliminada de cualquier ruta turística.Paseando por los alrededores de la Praça du Comerço, amables abuelitos se acercaban a mi con cualquier excusa y transcurridos unos instantes me ofrecían talegos de chocolate y bolsitas de marihuana. Como yo soy muy fiel de las drogas químicas y con receta, rechacé la propuesta de todos ellos.

El puente de la Mapfre (no sé su nombre real), se convirtió en una otra típica y tópica visita que uno se puede ahorrar viéndolo de lejos. Estoy seguro que más de uno pensará que el famoso puente fue fabricado por la citada compañía de seguros para su spot de televisión, con el fin de que su slogan "un puente hacia tu jubilación" tuviera algún sentido. Puede que sea así y puede que una vez terminado, se dieran cuenta que también servía para pasar al otro lado del río Tajo. Y qué es lo que hay al otro lado del río? Unas vistas preciosas y el Cristo Rei, una estatua similar a la que tienen en Brasil, pero menos comocida, porque yo, hasta esa misma semana no había oído hablar de ella. Jamás había imaginado que la desembocadura del Tajo fuera tan grande, tanto como para dudar dónde termina el río y empieza el océano. En sus orillas también finaliza el recorrido de muchas de las cloacas de la ciudad y es allí donde los peces tienen su particular supermercado poniéndose hasta las aletas de mierda humana (haz click en la imagen y los verás mejor).

16 comentarios:

Gurú Bear dijo...

Exigo mi souvenir de recuerdo! que mida mas de 1.80 y que tenga una alfombra en el pecho es obligatorio.

bwahaha pasatela bonito!

Pikitoni dijo...

Ahora mismo estamos indecisos por irnos de puente en Octubre a Lisboa o Florencia...

Tendré que esperar a próximas entregas, a ver si me decido.

Kisess

yonosoyHillary dijo...

GuruBear: de souvenirs irá una de mis próximas entradas.

Piki: Me decanto por Lisboa. En Florencia ya he estado tres veces y si quieres entrar en museos y demás te vas a tener que levantar a las cinco de la mañana para conseguir una buena posición en la cola. Lisboa no tiene nada super-mega-famoso que ver pero para un puente como ese puede dar mucho de sí.

yunzapito dijo...

Joder, dos entradas en un mismo dia?!?!?!?!

Pero qué es esto?!?!?!

Tengo que reconocer que me ha hecho muchísima gracia cuando has contado lo de ponerte a cantar el descongélate... creo que siempre hay que tener algo preparado para momentos como ése. Dependiendo de donde estés, si te decides a hacer el número de las pelotas de ping pong, puedes acabar linchado.

yonosoyHillary dijo...

Yunzapito: Pues me has pillado en pleno proceso de creación y como estamos tan conectado, has dado justo en el momento en el que estaba probando las imágenes de mi segunda entrada, que no verá la luz hasta de aquí a unos días.
Tienes mucha razón, puede que el "descongélate", en plan fado, no les terminara de encajar a los lisboetas y mucho menos, cuando después de un par de botellas de vino ya no recordaba ni la letra.

Casanova dijo...

JAJJAJ,HAS DESCRITO LA LISBOA QUE YO CONOCI EN 1993,VEO QUE SIGUE IGUAL,A PESAR DE LA EXPO 98 Y LA EUROCOPA DE NO Sè QUé ANYO,PERO ES BONITA,HOMBREEEE
NO MEZCLES BENZODIACEPINAS CON ALCOHOL,ACùERDATE DE DALIDA,NATALIE WOOD,KAREN QUINLAN,LA SCHNEIDER,Y TANTAS OTRAS...
PIKITONI FIRENZE ES PRECIOSA,TIENE RAZòN,PARA ENTRAR EN LA ALLERIA DEGLI UFFIZI DEBES HACER COLA Y CARACOLA,PERO PARA LO DEMàS NO TANTA,BUENO,L'ACCADEMIA UN POQUITO PERO OS VAIS CON TIEMPO,LA CùPULA DE BRUNELLESCHI MERECE LA PENA,Y ESA LA PODèIS VER LEVANTANDO LAS CABEZAS,VENGA,FIRENZE,JEJJE,ADEMAS LISBOA SIEMPRE PODEIS VISITARLA DESPUèS DE LAS OLIMPIADAS DEL 2082,QUE YA ESTARà ARREGLAITA,NO? JEJJE

Casanova dijo...

YNSHC,REDUCE EL NIVEL DE ACIDEZ (QUE ME ENCANTA) PERO LUEGO TENGO QUE ESTAR CON ALMAX COMO SOBRECITO DE CABECERA (ME ENCANTA,DE VERDAD)

@ELBLOGDERIPLEY dijo...

¡Hola! Tampoco imaginé cuando lo ví que la desembocadura del rio fuera tan grande, la verdad, me pasó lo mismo, exáctamente lo mismo.
El puente sobre el Tajo se llama "Puente del 25 de Abril", creo, por "La Revolución de los Claveles", que llevó a Portugal a la democracia.
Lisboa "la ciudad blanca", es aquélla otra capital, gran ciudad, que en la Península, no pensamos que existe, y que sea tan bonita...
Cadiz se parece un poco (o al revés), pero no... (bueno, Cádiz fue treinta años o así capital). El lisboeta es un poco rudo, puede ser, reservado, melancólico, no tiene afán por competir con nadie, sino que permanece como ensimismado...triste ..es increíble. Es una ciudad de las más tristes y melancólicas del mundo: no sé si me la han cambiado mucho...si digo que leyéndo a Pessoa, ocupé su misma habitación, la gente pensará que soy un mitómano: y no lo soy: fue una pura casualidad, como todo lo que te puede pasar siempre en Lisboa.
Un besote.

Reputada dijo...

Os subiríais en el Tranvia 28 para ir al Castello, no¿?, es imprescindible subir al viejo tranvia de madera, tan maravilloso cuando se va a Lisboa. Iríais a la pastiseria de Belem para comer los mejores y más increibles pasteles del mundo¿?, subiríais a los elevadores, tan antiguos, tan evocadores para ver la ciudad desde el cielo¿?, en fin, adoro Lisboa y creo que es una ciudad para quererse.
PIKI Y PERI TONI, irse para Lisboa, la decadencia no está reñida con el romanticismo, pensar que yo la adoro habiendo ido las dos veces mal acompañada, tengo prevista que la tercera y definitiva sea con mi GP, pa adorarnos.

Anónimo dijo...

Varias preguntas: ¿te patrocina alguna empresa farmacéutica? ¿Por qué tanta gente que conozco ha elegido este año precisamente para irse a Lisboa? ¿Por qué no me han llevado con ellos, con lo que me gusta? ¿Te dio mucha sed el bacalao? ¿Crees que es cierto lo que dicen de los portugueses (que están buenísimos hasta que se casan, momento en el cual se transforman, al instante, en Quasimodo)?

PD, para Pitoniki: en Florencia no tienes por qué hacer cola para entrar en los museos. Basta estar atento y reservar las entradas por teléfono unos días antes. Al menos en los Uficci, puedes hacerlo sin problemas. Por si decidís ir.

Churru dijo...

Qué bonita Lisboa...Estuve hace algunos años, pero por lo que cuentas, debe estar bastante igual. Todos los caminos acaban en Marqués de Pombal!!

Max dijo...

La recuerdo también algo quemada, no sé si seguirá así.

Esto sí es darle un aire decadente a Lisboa-sobre todo el final, con ampliación incluída.

Anónimo dijo...

La veo a usted pelín negativa, porke yo creo ke el encanto de Lisboa no se ve, es otra cosa.

goldengate(d) dijo...

pues una versión fado de algun temita de alaska hubiese tenido lo suyo, no te digo que no, aunque por el tono de voz veo a los fados mas cerca de nuestros queridos the national o interpol que de la olvido y/o el canut. lo de los abuelos camellos me ha encantado. me has hecho entrar el gusanillo. voy a mirar la agenda a ver cuando pillo el próximo puente (aunque no sea el de la mafre). un beijo.

yonosoyHillary dijo...

Casanova:Yo no sé cómo estaba Lisboa en 1993, pero desde los primeros instantes se intuye que necesita unos buebos apaños.
Respecto a los fármacos, ya sé que lo dicen los prospectos, que no los mezcles con alcohol, pero también dicen los médicos que el vino es sanísimo (eso se puede decir?)
El Almax es otro de los inventos de la industria farmacéutica al que más fe tengo, sabes que ahora te los dan en sobrecitos bebibles? No hace falta usar saliva ni masticarlos, ni rechupetearlos.

ElblogdeRipley: Es cierto, tu vida está llena de sorprendentes y agradbles coincidencias: pessoa, Cecilia...Yo no sé cómo es Cádiz, pero si es que como Lisboa debe hacer mucho viento.

Reputada: Sí, si, sí, hicimos todo eso y más. Por supuesto que nos subimos en el 28! Hicimos el recorrido entero, sin bajarnos en ningún sitop. Más tarde subimos a pie hasta el castillo del Santo bajito.
Coincido contigo reput, los Tonis deberían ir a Lisboa, cualquier día de estos la reforman entera y no tendrá nada que ver con lo que es ahora. En cambio, las obras de arte de Florencia seguirán tal cual por muuuuchos años.

Gwathadan: La decisión de ir a lisboa estuvo motivada por dos motivos: El primero la baratura del viaje (un chollo comparado con otros destinos) y la segunda la brevedad de mis vacaciones, necesitábamos un sitio extranjero pero al mismo tiempo cercano.
No me patrocina ninguna empresa farmecéutica, pero si se animan...ya saben donde estoy.

Churru: Es muy cierto, llega un momento, que por mucho que intentes alejarte y tomar caminos alternativos siempre terminas en e mismo sitio. Con Viena me sucedió algo similar.

max: Sí, es una buena descripción, sobretodo si pienso en la pateada que me metí hasta Belem bajo un sol abrasador a las tres de la tarde.

Mmm: Que va! si me ha encantao!!

Alex: Cierto, si hiciéramos una versión fado de Descongélate debería ser con otra voz diferente a la de Olvido. Por cierto, vas a verlos mañana? yo si.
El próximo puente? la diada pero te advierto que han subido ya los precios como la espuma, quizá para la Mercè...

Mrs. G dijo...

Como siempre con esa forma tan peculiar de contar tus historias me haz hecho reir con tus comentarios, sobre todo el de los "abueletes mulas"

No sabía yo que le tenías miedo a los aviones, una cosa en común entonces.

El puente de mapfre me parece a mi que es el golden gate de san Francisco....